Acaba el 2011 y quiero resumir brevemente lo que me ha pasado.
Termino el año mucho mejor de lo que lo empecé y creo que esto es muy importante.
Me refiero a que he conseguido AVANZAR deportivamente, aprendiendo a disfrutar más, a sufrir muchísimo más y a conseguir objetivos que te refuerzan mentalmente cuando los alcanzas.
Pero además he CRECIDO personalmente al conocer a personas que hace un año no sabía de su existencia y que hoy en día son un pilar fundamental de mi "yo", de mi ser, de mi día a día. A algunos los veo a menudo, a otros no tanto, pero me considero un afortunado por ello y sin duda es lo que más me ilusiona de este año que acaba.
El 2011 ha sido un año fantástico para mí y creo que para las personas más o menos cercanas. He podido debutar y acabar varios triatlones (4) que era mi objetivo deportivo del año. Deseaba hacer alguno, saber lo que se siente al competir enlazando las 3 disciplinas, sufrirlas y saborearlas en cada momento de la prueba y finalmente cruzar el arco de meta con el premio de acabar, sólo eso, acabar y conseguirlo como un reto personal contra uno mísmo.
Ha sido el año en el que más he entrenado en toda mi vida y aunque los volúmenes a muchos les parecerán ridículos a mi me han llenado de experiencia y vivencias.
He probado el veneno del trail de una forma muy intermitente y fugaz pero disfrutándolo muchísimo gracias a Michel, sobretodo en verano con las salidas a las 6:30 por el cabo+bañá con personas a las que considero ahora nuevos amigos.
En la natación cada vez mejor, es el deporte en el que más he mejorado y en el que exponencialmente estoy disfrutando y aprendiendo a gran velocidad. Gran parte de culpa tiene la gente tan cercana y asombrosa con los que nado en el club RC7, aunque no quiero olvidar a otro club, El San Vicent del Raspeig, con los que compartí numerosos entrenos en el mar desde julio a septiembre y me abrieron sus puertas como si fuese uno más de ellos.
En la bici he pasado de forma radical de la montaña al asfalto, y eso es algo que tengo como una espinita clavada. Hasta ahora el deporte en el que más he disfrutado es con la bici de montaña, para mí no hay nada igual. Por eso me voy a proponer para el próximo año salir de vez en cuando.
En cuanto a la bici de carretera hemos hecho una buena grupeta los triatletas del Virgin a los que tengo ya como una nueva familia deportiva. Cada día estoy más a gusto con el asfalto y con la sensación de velocidad y dureza de la carretera.
En cuanto a las lesiones empecé el año arrastrando problemas anteriores de la cintilla que poco a poco se fueron solucionando hasta el punto de permitirme entrenar lo mínimo para correr los triatlones. Después descubrí una lesión llamada fascitis plantar que se solucionó a base de masajes, estirar la planta del pie con una pelota de tenis y alguna corrección tanto en las plantillas como en la cala de la zapatilla.
Por último, y aún no solucionado, acabo el año con una lesión de pubalgia que me impide correr desde hace algo más de un mes. Parece que va remitiendo pero aún es pronto para decirlo.
Si hay algo que he aprendido de las lesiones, en mi caso particular, es esto.
- Necesito plantillas deportivas para corregir mi pie raro, el último podólogo que he probado parece que ha dado con la tecla, y gracias a ello tengo menos tensionadas las piernas.
- Una vez al mes, o antes, necesito una sesión de fisio para descarga muscular de gemelos, isquios y cuádriceps.
- Desde que tomo suplementación alimenticia en forma de vitaminas o regeneradores de cartilago y tendones apenas tengo problemas de tendinitis, y eso que hasta ahora siempre he tenido problemas con mis tendones de cristal.
- He descubierto que hay una cuarta disciplina que hay que entrenar, es el trabajo de fuerza en el gimnasio. No estoy hablando de hincharme a pesas, al contrario, sino de fortalecer grupos musculares olvidados en los deportes que ya practico, y me refiero sobretodo al fortalecimiento de abdominales y lumbares. No puedo tener olvidado este elemento de unión entre el tren superior y el tren inferior, necesito fortalecerlo para no lesionarme.
Todas estas experiencias deportivas vividas a lo largo del año han sido posibles gracias a que laboralmente soy un afortunado al trabajar, hacerlo cerca de casa (por ahora), y con un horario que me permite entrenar a primera hora del día o a mediodía. Sin embargo esto tiene fecha de caducidad pero aún no la sé.
Pero en realidad todo esto no habría sido posible si no hubiese una cosa más, mejor dicho alguien más, que me permite, a costa de estar este tiempo sin ella, disfrutar del deporte tanto como lo he hecho este año. GRACIAS Lou.
A lo largo del año ha habido momentos en los que me he sentido de verdad FELIZ, afortunado por estar en un sitio determinado y acompañado de personas excepcionales.
Como resumen de entrenos del año ahí van algunos datos:
Natación: 202Km en 94 entrenos.
Ciclismo: 2780Km en 70 salidas de bici tanto BTT como carretera.
Carrera a pie: 420Km en 61 salidas (muy poco volúmen sobretodo por las lesiones, la tirada más larga del año 14Km, ejem, ejem)
Triatlones: 4, Santa Pola (Sprint), Alicante (Sprint), Oliva (Olímpico) y Benidorm (Olímpico).
Marchas BTT: 3
Como objetivo para el próximo año me daría con un canto en los dientes si me ocurre algo parecido otra vez.
FELIZ AÑO 2012.


























Habitualmente se denomina hipoxia a la disminución de la concentración de oxígeno tomando como referencia el contenido de oxígeno del aire a nivel del mar. Si pretendiera ser totalmente estricto con las definiciones, no debería hablar de variaciones en las concentraciones de oxígeno con la altitud sino de variaciones de la presión parcial de oxígeno, pero dado que no pretendo ser científicamente correcto sino que la población general comprenda lo que quiero transmitir, hablaré de cambios en la concentración de oxígeno con la altitud.
La hipoxia supone un importante estímulo para el organismo, ya que la disminución del oxígeno del aire que respiramos va a dar lugar en primer lugar a una disminución en el transporte de oxígeno a través de la sangre. Esta disminución del transporte de oxígeno a través de la sangre puede ser objetivada mediante la medición de la saturación arterial de oxígeno, para lo que es habitual la utilización de pulsioxímetros. La disminución del transporte de oxígeno va a dar lugar a un aumento del
Y hay que decir que el organismo no es capaz de saber si la disminución de la saturación arterial de oxígeno es debido a un problema pulmonar, o es debido a que la persona se encuentra en altitud, o que es debido a que respira aire empobrecido en oxígeno a propósito (hipoxia artificial); el organismo capta la disminución de la saturación arterial de oxígeno, pero no las causas que generan dicha disminución. Y una de las respuestas del organismo ante la disminución de la saturación arterial de oxígeno es el aumento de
A pesar de la lógica fisiológica que relaciona la exposición a la hipoxia con el aumento de los parámetros hemáticos, hay personas y colectivos que no dan demasiada credibilidad a que el estímulo hipóxico pueda traer consigo un aumento de los valores sanguíneos. Imagino que dicha incredulidad puede venir derivada de la gran variabilidad de resultados obtenidos en los diferentes estudios que correlacionan hipoxia y hematología realizados y entre ellos hay algunos publicados en revistas científicas en las que la realización de hipoxia artificial no se traduce en un aumento de los parámetros hemáticos. Existen bastantes estudios similares, en los que entre las conclusiones los autores dicen algo así como: "la realización de 4 semanas de hipoxia intermitente no ha traido consigo cambios significativos en los parámetros hematológicos". Y como tendemos a generalizar, la lectura de esa frase nos lleva a pensar que la hipoxia artificial no trae consigo cambios hematológicos, a pesar de que los autores de los estudios han acotado la realización de hipoxia a unas condiciones determinadas (intensidad de la hipoxia, tiempo de exposición,...).








