PESTAÑAS

jueves, 10 de mayo de 2012

DOS RECUERDOS IMBORRABLES

Aparte de experimentar, sentir y disfrutar muchísimo del triatlón de Arenales (medio IM) hubo dos cosas que se me quedarán grabadas a fuego,

pero antes una breve síntesis de lo que me ocurrió en la prueba;

1) la natación muy cómoda, bien, a un ritmo decente.
2) la bici desastrosa, en la 2ª vuelta me entró un dolor de estómago fortísimo que no me permitía pedalear con fuerzas y peor aún, ni bebí ni comí durante una hora, lo que me preocupó para el siguiente segmento, nada más y nada menos que una media maratón dura, con cuestas, escaleras, dunas y un calor guapo.
3) Empiezo a correr y parece que no me molesta tanto el estómago como con la bici, trato de ir cogiendo ritmo y empiezo a beber y comer fruta de la organización encontrándome cada vez mejor y eso me anima. A partir de aquí empiezan las 2 huellas que se me han quedado en la memoria.

1ª) Alcanzo a Frede (Brus para los amigos, jeje) que va jodido con dolores en el tibial por una lesión que en teoría le impide correr, y ahí está el tío, sufriendo como un jabato, a un ritmo suave pero contínuo. Me quedo un rato para darle ánimos. En este momento me asalta una duda que por suerte se despeja pronto de mi cabeza. Pienso que puedo ir más rápido y que a este ritmo no haré una marca decente. PURO EGOÍSMO. Pero en ese instante prefiero seguir dándole ánimos a Brus, sigue arrastrando un dolor que le hace rabiar con cada pisada, intenta ir cambiando los apoyos, estirar más las piernas, todo lo posible para avanzar unos metros más y no abandonar. Me voy animando al ver que sigue luchando contra su destino,  no había visto nunca a nadie correr con tanto dolor como para ponerse a llorar y aún así no parar. 
Van pasando los km y nos vamos acercando a meta. LA CAPACIDAD DE SUFRIMIENTO DE MI AMIGO Y EL BIENESTAR QUE SIENTO al inyectarle un pequeño empujón mental me hacen emocionarme llegando a los últimos 100m. Siento FELICIDAD por ayudar a Frede....cuanto he aprendido en esta carrera, que lección me has dado amigo. 

Esto hace que enlace con el 2º momento inolvidable de ese día..

2ª) En meta está Lourdes, Cristina y su marido, animándome cada vez que he pasado delante de ellos, así como los RC7 y otros amigos, y es en ese momento en el que Lourdes me acerca a mi peque Jaume  emocionado de verme correr entre tanta gente, lo abrazo, me pongo a correr con él en brazos, empiezo a sentir escalofríos, piel de gallina, los ojos empiezan a soltar algunas lágrimas... corremos de la mano entrando a meta. Ahora siento FELICIDAD por estar allí con él.



Ya soy medio-finisher, he sentido la satisfacción de cruzar Arenales.......aunque realmente me habría dado igual no cruzarla, sólo por lo que he aprendido y sentido ha valido la pena participar.

Total: 5h56'